Este 1º de Mayo voy a recordar las razones por las cuales desde que tengo uso de razón he respondido a la convocatoria que hacen los trabajadores para participar en tan magestuosa marcha . Esta vez, como nunca antes, desde casa. Sin el bullicio, sin la música, sin las comparsas. Sin cientos de banderas, sin carteles, sin sudor a las 7 de la mañana.
Peeeero, no obstaaante, en casa….
Tendré bulla, tendré música, tendré comparsas. No tendré cientos de banderas, pero tendré las mías: la de papel en la mano y la de tela colgando del balcón. No tendré cientos de carteles, tendré los cuadros. y por último quizás no tendré ese sudor de grupo, pero tendré sudor de familia.
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